Los profesionales tienen que tener una estrategia si quieren adaptarse al la constante evolución en la que se encuentra el mercado. El miedo al cambio es un obstáculo que impide progresar. Los profesionales tienen que reinventarse y explotar su ventaja competitiva que radica en su saber experto para apostar por nuevas oportunidades.
Muchos de los problemas que se presentan ahora son similares a épocas anteriores pero el entorno y la cantidad de factores que ahora influyen son completamente diferentes, por lo es necesario buscar soluciones distintas para alcanzar el éxito. Esto pasa por la adaptación a la realidad de cada sector y empresa.
Una de estrategia de éxito es la especialización, con lo que obtener ventajas competitivas. Ésto sólo se logra con la inversión en la adquisición y afianzamiento de conocimientos especializados. Con estos conocimientos se puede profundizar y consolidar habilidades y experiencia, otra forma de interpretación e implementación de conocimientos, para ser expertos, sobresalir de la media en el mercado. Es vital la formación y actualización del capital humano, de los empleados. Decidiendo, esa es la clave. Muchos de los problemas que están en el mercado se debe a que no se toman las decisiones adecuadas, por miedo, pero que están provocando el estancamiento.
Un profesional experto, especializado y con capacidad de adaptación a la realidad de cada empresa, puede ofrecer sus servicios, superando la calidad de la media y a un menor coste.
Una de las oportunidades, siguiendo esta tendencia, se encuentra en generar alternativas para dar respuesta y solución. Nada es estático y todo puede ser enfocado y analizado desde distintas perspectivas, dándole una adecuada solución. Esto lo explica la Teoría del Oceano Azul (W. Chan Kim y Renée Mauborgne, 2005).
Esta teoría se centra en la generación de valor a través de la innovación, dejando a un lado la competencia desproporcionada entre las empresas. Es decir, un profesional tiene que diferenciarse por el valor que aporta, si es realmente un profesional, experto, puede buscar su diferenciación y desmarcarse de cualquier competidor.
Como resultado, se diferencia positivamento de la competencia, generando un valor superior a la media y puede evolucionar y presentarse al mercado con total libertad, despreocupándose del precio.
La estrategia del océano azul se caracteriza por:
– Busca alternativas, para explorar oportunidades y soluciones, al entorno tan cambiante.
– Plantea su profesión, con orientación a la especialización.
– Busca otros clientes que valoren la profesionalidad, el saber hacer.
– No plantea la elección entre calidad y precio. El servicio es experto, con alta calidad y a buen precio.
– Siempre investiga, analiza. Cuestionar es avanzar, aprovechando nuevos conocimientos y habilidades.
En definitiva, los profesionales tienen que enfrentarse a nuevos retos. La clave es ir más allá, con reflexión, actitud analítica, positiva y siempre dentro de la cultura del esfuerzo. La estrategía es la diferenciación a través de la especialización.
Todo es evolución, y la capacidad de adaptación, sólo se consigue con una profunda preparación.